En 2014, en la Bienal de Radio México, un grupo de profesionales de esa disciplina de origen latinoamericano, conscientes de la riqueza sonora de nuestra región y de su clara identidad, decidió impulsar la creación de un espacio destinado a reflexionar sobre sus historias y empezarlas a compartir a través de documentos que las reflejaran. Con ese fin y con un entusiasmo que no ha decaído, nació en aquella oportunidad el llamado Foro del Documental Sonoro (SINODOC) en español, que en el décimo aniversario de su creación se reunió en Buenos Aires, en Argentores, para continuar con la tarea que se impuso en ese momento y que ha seguido desarrollando a través de esta década. Tres de los integrantes del Consejo Profesional de Radio de Argentores, su presidente, Pedro Patzer, y dos de sus colaboradores, Florencia Flores Ibarra y Mariano Pagnucco, en ese orden, nos ofrecen, en las líneas que siguen, sus respectivas miradas sobre la importancia de este foro, a la vez que celebran los frutos de aquella iniciativa surgida por aquellos años y su continuidad.

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“Reivindicar la narración sonora en un mundo que cada vez se escucha menos, es también valorar la palabra, el puente humano, cultural y político que ella significa en estos tiempos, recordemos que la radio es hija del destino de la palabra.

Haber recibido a Sonodoc, foro de documental sonoro en español, en Argentores es confirmar una mirada de todo eso que llamamos radio autoral, todo eso que se manifiesta en documentales, ficciones, humor y otras yerbas, en podcast, contenidos de radio subidos a youtube, emitidos por streaming, o por emisoras de aire u online. Sonodoc es una especie de congregación de autores de Iberoamérica que documentan esas historias que conforman las identidades de los países, como existen tonadas en el habla, también hay modos de ser, de habitar, de trascender y de contar propios de cada pueblo. Que, en medio de la cultura de la imagen, potenciada por el uso de eso que llaman ‘teléfonos inteligentes’, se elaboren relatos autorales sonoros que retomen la potencia de los rapsodas que de pueblo en pueblo llevaban historias, historias que no son espejismos, más bien son espejos sonoros que nos invitan a reflejarnos en la esencia de lo que somos, es una buena noticia.

Sonodoc nos recuerda que hay otras historias, que trascienden las aduanas del mainstream de las plataformas internacionales, historias que no hablan en neutro, ni propician arquetipos de la nada, historias que no piden permiso a los algoritmos, historias que proponen la otra agenda, la de la auténtica convivencia cultural.”

  Pedro Patzer

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“Latinoamérica vibra con un sonido único, una identidad que resuena en cada rincón de nuestra región. En 2014, en la bienal de México, esa riqueza sonora inspiró a un grupo de profesionales a dar vida al Foro de Documental Sonoro SONODOC, un espacio diseñado para reflexionar sobre nuestras historias y compartirlas a través del arte del documental sonoro.

Diez años después, y por primera vez, el foro llegó a Argentina, convirtiéndose en un auténtico ritual: un encuentro para explorar las formas de producción, los temas que nos conectan y las herramientas tecnológicas que nos permiten capturar y amplificar la realidad. Porque mientras exista registro, habrá esperanza.

El documental sonoro es más que un medio; es un amplificador de historias reales, aquellas que emocionan, inspiran y dejan una huella imborrable. Es una experiencia de escucha profunda que nos invita a reconectar con nuestra esencia.

SONODOC nos transporta a la infancia, a esos momentos en que escuchábamos fascinados las historias de nuestras abuelas, relatos que, como antiguas melodías, encendían la imaginación y nos hacían soñar con un mundo mejor. Una celebración del arte de escuchar, que nos conecta con la cualidad más poderosa del audio: su capacidad de emocionar.”

Florencia Flores Iborra

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“En el origen fueron seis que no se conocían entre sí, pero detectaron que los unía el mismo amor por el documental sonoro. Pita Cortés (México), Alejandro Cornejo (Perú), Juan Carlos Roque (Cuba), Karla Lechuga (México), Charlotte de Beauvoir (Colombia) y Francisco Godinez Galay (Argentina) coincidieron en la Bienal de Radio de México, en 2014, y fundaron con más entusiasmo que certezas SONODOC.

Con una década de recorrido y distintas geografías atravesadas por la misma pasión, volvieron a juntarse (algunas presencias físicas y otras virtuales) en Buenos Aires. Fue la confirmación de que todavía hay historias para contar en formato documental y sonoro.

Fue también la excusa para reavivar debates que mantienen vivo el espíritu creativo de los y las documentalistas del continente: la presencia o no de narrador en las historias, la inclusión de paisajes sonoros para sumar colores al relato, el óptimo registro de los testimonios o los ambientes con dispositivos electrónicos, la utilización de archivos históricos como anclaje real de los hechos… Con las particularidades de este tiempo (plataformas, escucha on demand, redes sociales), lo que no se modifica es las ganas de documentar en sonidos.

Ser parte de esta ceremonia que lleva una década de vigencia ha sido un placer. Poder estar, escuchar, aportar alguna mirada, sonreír o emocionarme con los audios compartidos, las tonalidades del continente sonoro mezcladas en los distintos paneles del foro. Como dice Juan Carlos Roque en uno de sus libros, ‘así suena la vida’. Y el documental sonoro es el modo de atraparla para que las historias del continente sigan multiplicándose en los oídos y los corazones curiosos.

Esto también continuará.”

Mariano Pagnucco