Con profundo dolor, Argentores despide a Héctor Alterio, uno de los actores más extraordinarios que ha dado nuestro país. Su partida marca el fin de una era, pero deja un legado artístico que ya es parte de la identidad argentina. Desde nuestra entidad enviamos nuestras condolencias a sus familiares, amigos y colegas en este triste momento.
Aunque Alterio fue autor, desde sus inicios fundacionales en el movimiento de teatros independientes con Nuevo Teatro, Alterio demostró un compromiso inquebrantable con el texto y con la realidad social. Fue el rostro de la tragedia en La Patagonia rebelde (basada en la obra de Osvaldo Bayer), interpretación que, cruzada por la violencia política de los años 70, lo llevó al exilio en España.
Lejos de su tierra, se convirtió en un embajador de nuestra cultura, construyendo un puente artístico entre ambas orillas del océano. Pero nunca dejó de ser “nuestro”. Regresó para darnos la primera alegría del Oscar con La historia oficial (con libro de Aída Bortnik y Luis Puenzo), para conmovernos en La tregua y para emocionarnos hasta las lágrimas en El hijo de la novia o Caballos salvajes.
Las autoras y autores argentinos sabemos que una obra de teatro o un guion solo se completan cuando un intérprete de la talla de Héctor Alterio los habita. Él dignificó nuestra palabra, elevó nuestros conflictos dramáticos y nos regaló momentos que el pueblo ha hecho suyos para siempre.
